Batalla liga 1ª vuelta Tau vs Demonios del caos

Datos de la partida
Asegurar el control. 4 objetivos . Iniciativa de Peybol McPeybol.
Informe de batalla
Jugamos al mapa número uno de los diseñados. En mi flanco derecho tenía la mega-ruina, con dos ruinas esquineras . en medio ,dos coberturas de área, y a mi izquierda un edificio. Acordamos dar al edificio blindaje 11, tanto al de mi lado, como al de Pablo. Pablo decidió ir en segundo lugar, por lo que me tocó desplegar. Los puntos estaban mas o menos centrados y cerca los unos de los otros, con excepción del que estaba en medio de la megaruina. Mi despliegue consistió en hacer dos grupos, el de mi derecha estaba formado por 3 pirañas, las tres apocalipsis que se quedaron fuera del edificio pero pegados, con la intención de atraer a los nurgletes, y los exploradores en el piso de arriba. el grupo de la derecha estaba formado por el resto de mi ejército, salvo los kroot, que teniendo todo el tablero para infiltrar, los puse donde quise, que fue una unidad en medio del punto de la mega ruina (ese punto lo puse especialmente para ellos) y la otra unidad estaba en el edificio de la zona de despliegue enemiga, ocupando la planta de arriba. Pablo y yo habíamos acordado que si estaban en la terraza, las miniaturas podían ser víctimas de disparos, pero teniendo cobertura. Cómo me tocaba a mi empezar, en ausencia de objetivos a los que disprar, porecdí a mover un poco las tropas para tener mejor cobertura y para posicionarlas para cuando viniese el enemigo. Aquí fue clave las pirañas, que movieron a toda velocidad 60 cm para colocarse de culo al flanco izquierdo, al centro del tablero. La zona de la izquierda era la que menos escenografía había, por lo que era posible que cayesen ahí mas enemigos, así que las pirañas estarían preparadas par colocarse donde mas falta hiciese. Inteligentemente, Pablo desplegó el aplastador de almas lejos de las pirañas y de las apocalipsis, en una zona un poco pequeña, pero con suerte no tuvo problemas. En la zona despejada vi como aparecía un príncipe demonio, lo cual en un principio pudo ser un problema, pero que pude solucionar. Las demás unidades de Pablo cayeron sin problemas, y creo que no murió nadie por terreno peligroso, a pesar de que hizo unos cuantos chequeos. Delante del aplastador, aparecieron los horrores rosa, y McPeybol decidió correr con todo excepto con el Príncipe, el aplastador y los incineradores. Si hubiese disparado con los horrores, a pesar de estar en cobertura, los kroot de la mega ruina habrían sufrido mucho para no huir, y por suerte Pablo no les disparó. El aplastador disparó contra uno de los cabeza martillo, pero el área se movió demasiado y no consiguió impactarle con la suficiente fuerza como para poder hacer algo. El príncipe demonio disparo a las pirañas, acobardando y destruyendo el bláster de una a pesar de tener cobertura por ir a toda velocidad. Los kroot fueron abrasados por el fuego disforme de los incineradores, pero a pesar de ver los cadáveres carbonizados de sus compañeros, superaron el chequeo y se mantuvieron firmes. En mi segundo turno sabía que iba a contra reloj, antes de que saliesen las demás unidades, por lo que tuve que darme prisa. Moví a los pirañas 30 cm en dirección al borde opuesto al mío, con la idea de picar al príncipe para que fuese a por ellos. Cómo los nurgletes habían picado, y se habían desplegado directamente delante de las apocalipsis, simplemente las metí dentro del edificio, por lo que los nurgletes eran inútiles donde estaban. Las crisis se movieron para poder tener objetivos, aun que al final sólo dispararon a la otra unidad de nurgletes que había aparecido en el centro, justo delante. Uno de los cabeza martillo avanzo bordeando la mega ruina con la intención de quitarle cobertura al aplastador de almas. El otro se quedó atrás, para dar cobertura a las crisis cuando estuvieran de vuelta. El príncipe demonio salvó todo con lo que le dí, y en el primer turno a pesar a haberle disparo 5 veces no conseguí hacerle ni una sola herida.Con un disparo de el cabeza martillo que bordeó la mega ruina, pude hacerle un interno al aplastador, inmovilizándolo hasta el final de la partida. Con las crisis hice varías heridas a los nurgletes del centro. Los kroot de la mega ruina asaltaron a los horrores rosa, y a pesar de que lo hicieron con iniciativa 1 (por asaltar a través de cobertura), pudieron ganar el combate por 7 heridas contra 1, y por el coraje se quedó solo el heraldo. los kroot que habían sobrevivido al ataque de los incineradores, bajaron del edifcio y llegaron a asaltarles, siendo solo 2 kroot y cuatro mastines, pudieron ganar el combate por una herida, y solo quedó un incinerador. Me preparé para lo peor, porque dependiendo de las tiradas de reservas, podría tenerlo muy fácil, o muy difícil. Pablo reagrupó a los portadores de plaga en el punto que se encontraba en el bosque, y yo ya sabía que con resistencia 5, invulnerable, no hay dolor y cobertura, sería muy difícil acabar con ellos, por lo que dejé ese punto cómo perdido. Las reservas de Pablo fueron escuetas, apareciendo los rastrea almas, incineradores y los que mueven cómo motocicletas, que me vaís a perdonas, pero no me acuerdo cómo se llaman. Gracias al icono del caos, aparecieron a 15 cm de los portadores, pero para mi suerte, fuera de cobertura. El príncipe demonio picó y retrocedió buscando darle muerte a los pirañas,y el aplastador, estando inmovilizado intentó disparar, pero al no poder rotar no tenía nada a la vista ni al alcance, por lo que perdió su fase de disparo. El príncipe disparó y asalto a los pirañas, destruyendo a uno de ellos con una terrible explosión, que dejó un cráter en el sitio donde antes había estado el vehículo. Gracias a que había movido los pirañas a 30 cm, solo podía impactarles con 6, por lo que me libré de un destino peor. En mi tercer turno tenía claro que tenía que hacer el mayor daño posible en un solo turno, por lo que disparé a lo que no estaba en cobertura, que eran los rastrea almas. No fue difícil acabar con ellos, gracias a las áreas de los cabeza-martillo, que clavaron todas las áreas que les tiraron, y con el fuego combinado de varias unidades, cómo crisis y manta-raya borré a la unidad del mapa. Rematé a la unidad de nurgletes del centro, que amenaza con trabar a las crisis, lo que habría sido desastroso, y continué disparando al príncipe con las apocalipsis y con los pirañas, logrando hacerle un par de heridas. Fue una fase de disparo bastante buena, y a pesar de que las crisis no daban una, pude destruir tanto los rastrea almas como los nurgletes. Mi general se movió hacia adelante buscando disparar al aplastador, pero sólo llegó una de las crisis y no llegó a penetrar el blindaje. La mermada unidad kroot que había cabado con los incineradores, vio que aparecían mas de esas bestias, y no pudieron contener su rabia por la suerte sufrida por sus camaradas, y asaltaron contra ellos. Gané otra vez el combate, pero se quedaron trabados, muriendo los kroot restantes y quedando solo 4 mastines kroot.
En el turno de Pablo, aparecieron los aplastadores y el guardian de los secretos. Quisieron los dioses del caos ser caprichosos, y pusieron al gran demonio detrás de mi cabeza martillo que estaba en la retaguardia, pero dispersándose fue a parar encima de una unidad enemiga, y en la talba salió 2-3: el enemigo coloca a la unidad donde quiera. La coloqué a un lado del edificio de su zona de despliegue, pegado al borde cerca de los pirañas, con la intención de retrasar el posible ataque. Los aplastadores aparecieron donde antes estaban los rastrea almas, e intuyo que se mofaron de los siervos de Slanesh al ver su debilidad, pisoteando sus cadáveres. Sabía que esa unidad podía absorber una cantidad de fuego alta, por lo que decidí disparar a lo que fuese mas prioritario, siendo en este caso las bestias de cuyo nombre no quiero acordarme. Al no tener mucho disparo, los turnos de Pablo se resolvían rápidamente, siendo lo único los disparos del príncipe contra los pirañas, y el consiguiente asalto, y el aplastador de almas lanzando plantillas contra los kroot de la mega ruina. Esta vez, los pirañas se salvaron por los pelos, no llegando a impactar ni disparando ni en cAc. Resolvímos el combate de los masintes kroot, que devoraron al incinerador restante, y sin la guía de sus cuidadores, cerraron el pasó al guardián de los secretos. Si los mastines fuesen algo inteligentes, sabrían que su sacrificio fue para ralentizar al enemigo, pero siendo poco mas que orkos, simplemente se quedaron ahí, quietos (mis disculpas a Heibor por la comparación). En mi siguiente turno coloqué al general al costado del aplastador, pudiendo disparar las armas de fusión y logrando un resultado de armamento destruido, por lo que no podía ni moverse ni disparar, así que dejó de ser relevante para mí en la batalla. Moví los pirañas por encima del príncipe, colocándolos entré él y mi lado largo del tablero. Abrí fuego a las bestias sin nombre, ya que mueven cómo motocicletas y tienen granadas de fusión, así que conseguí destruirlos y póco más. Hize unas pocas heridas a los nurgletes y posicioné mis mantarraya para conquistar los puntos que me quedaban.
En el turno de Pablo aparecieron los desangradores que se situaron justo en el punto que estaba en la formación rocosa, y los aplastadores de almas avanzaron hacia mi territorio buscando presas. El guardián acabó con los mastines con la misma facilidad con la que Thrunk mueve 90 cm con sus vehículos, y consolidó, por suerte para mí solo 3 cm. El príncipe terminó su oscura tarea y destruyó los pirañas, explotando a uno y destruyendo al otro, dejando entre el príncipe y mis unidades dos áreas de terreno difícil , y una de terreno peligroso, por lo que ralentizó todavía mas el avance de esta monstruosidad. Como creo que ya es bastante largo esto, hago un resumen de lo que pasó. Mato al principe, mato a los desangradores, mato a los nurgletes, me mata a los guerreros de fuego con los aplastodores, me destruye un manta-raya. Fin de la partida. resultado 2-1 a mi favor.
Los Tau, a pesar de sufrir bajas, se fueron a casa con el deber cumplido. Si pablo hubiese tenido un poco mas de suerte con las tiradas de reservas, habría pasado de otra manera.
Mi unidad mas brutal.... no sabría cual decir, todas hicieron su papel, pero por ejemplo una de crisis mató al gran demonio en un turno, el cabeza martillo hizo mas bajas , y los kroot me dieron la partida..... si tuviese que elegir una, el cabeza martillo, que inmovilizó al aplastador, clavó todas las áreas, remató al príncipe demonio, y no falló ni un solo disparo.

No se muy bien que decir, la batalla ya ha sido bastante bien explicada. Solo quiero añadir que sigo sin saber por donde entrarle a los Tau, me ha pasado como en la ultima batalla en la que me enfrente a ellos, al aparecer mis unidades reciben una cantidad brutal de disparos y no se como reaccionar, ya que muchas no sobreviven. Tendre que cambiar de táctica cuando nos enfrentemos otra vez en la 2ª vuelta. Como "unidad brutal" no se a quien designaria, ya que no creo que nadie se haya ganado ese honor

El príncipe demonio destruyó a las pirañas, los aplastadores destruyeron a 6 guerreros de fuego y un mantarraya, y el guardián de los secretos destruyó a los mastines. Por ahora sabemos que tu unidad brutal son los aplastadores.

Lo que deberías de hacer contra los tau es ser mucho mas agresivo y tirar pa' alante siempre. Te puede pasar como con el guardián de los secretos y que te salga mal la jugada, pero imagínate que se hubiese clavado en la retaguardia; me habrías liado una que seguramente me habría costado la partida. Normalmente vas a arriesgarte y esta vez fuiste a lo seguro utilizando el icono de los portadores, por lo que estaban demasiado atrás cómo para cargar y hacerme añicos. Con otros ejércitos no te lo recomendaría, pero contra tau, arriesga, tira hacia delante y carga hasta con los nurgletes !